«Vivir en Arteixo es como vivir en el paraíso. Tienes todo cerca, la playa al lado… No lo cambiaría por nada». Yago García-Garabal aterrizó hace diez años en O Rañal. Es uno de los habitantes que defienden la calidad de vida en los municipios del área. «Mis amigos siempre que vienen a verme se quieren quedar aquí. Y siempre hay gente que pasa por la zona y se para a preguntar si se alquila una casa». Yago, que creció en un piso, tenía un sueño: tener una familia, un huerto, perros y vivir cerca de la playa. Y todo lo encontró en Arteixo. Allí se mudó con su mujer Patricia a una casa al lado de sus suegros, en un local que en otra época fue el bar de los abuelos de su mujer.
Le atrapó la zona y un pequeño huerto que tenían en la parte de atrás de la casa. Allí empezó a plantar sus hortalizas y verduras y pronto descubrió una pasión: la horticultura. Después de formarse, de experimentar y de escribir un blog sobre el tema Cos pés na terra, su vida en Arteixo y su experiencia en el huerto le llevaron a convertir su pasión en su profesión. «Al huerto le doy las gracias por todo, por traerme aquí, por mi familia y por mis perros. Es mi paraíso», confiesa este asesor y creador de huertos ecológicos.
Yago García-Garabal 